viernes, 6 de noviembre de 2015

Hoy nace GUSY GLOW

Nacimiento oficial de mi nuevo Starlite LED para la pesca: GUSY GLOW

Pues si. Después de un año trasteando, inventando, diseñando, rompiendome la cabeza, y demases inherentes al desarrollo del mismo.. nace GUSY GLOW. Un nombre molón, a que si?

Este si. Este es el definitivo. Increíble, inigualable, excepcional. No tengo adjetivos para calificar este pequeño aparatito que hace tan emocionantes y divertidas la pesca de cefalópodos. Muchas horas le he dedicado y me he entretenido creando esta pequeña maravilla. Finalmente sale a la luz. Lo voy a comercializar de manera minoritaria, probaré a ponerlo en Internet y a ver que tal es la acogida que tiene. 

Realmente no tengo muchas expectativas en hacer grandes ventas. Por el momento, en el muelle que pesco ha tenido buena aceptación, pero también ha desatado cierta escepticismo, pero bueno, ya sabemos como son los viejos con las moderneces. Personalmente me quedo tranquilo, he finalizado lo que me había propuesto lograr, y aun encima casi sin medios. Si no tienen ventas no me preocupa en exceso, con poder usarlos yo y mis amigos, y disfrutar de ellos, me llega.

La única pega es que quería haberlos hecho más pequeños y un poquito más profesionales en cuanto se refiere a acabados, pero bueno, con los medios disponibles, es lo que hay, que no es poco.

Un gran día para mi, y espero que para algunos otros pescadores.



Un Saludo y Buena Pesca!

martes, 1 de septiembre de 2015

Fin temporada Surfcasting 2015

Todo tiene un principio, y un final, por desgracia

Pues sí, después de estar esperando los largos meses de invierno a que llegase la primavera-verano para pisar arena y disfrutar del Surfcasting, el tiempo ha pasado volando y  llega a su fin por este año. La verdad es que no tengo queja, no ha sido un buen año en cuanto a capturas, pero sí en cuanto a experiencias y momentos agradables.

Para despedir la temporada, el mar me agracio o desgracio, según se quiera ver con una última captura: una uxa. 


 Es un pez bonito de sacar, ya que suelen ser grandes y pelean, pero una vez en tierra no es de mi gusto. Por suerte, tengo amigos pescadores que disfrutan de ellas en el plato y se encargaron del arduo trabajo de desanzuelar, matar y cortar, llevándose el susodicho ejemplar como premio.

Bueno, aquí pongo el punto y final a esta temporada de Surfcasting. Espero que el duro invierno se pase pronto y poder estar rápido de nuevo en estas aguas que tanto amo. Entre tanto volveré al Egging dándole duro a los cefalópodos y disfrutar de nuevo de la comodidad de la pesca urbana.


Un Saludo y Buena Pesca!

lunes, 10 de agosto de 2015

Lubinacas a tutiplen

Día muy propicio para las lobas

Hoy a sido un día excepcional. En estas aguas estamos acostumbrados a que se de mayormente sargos, panchas, y esparidos varios que frecuentan estas zonas. Las lubinas suelen hacer acto de presencia a cuenta gotas. Lamentablemente ya conocemos todos como está el estado de la población de la fauna marina, cada vez más sobre explotada y con una presión que en poco tiempo acabará devastando el mar.

Algunas voces se alzan en contra de la pesca deportiva. Soberbia mentira. Los peores son los profesionales. Caimanes sin escrúpulos que no ven más allá de sus propias narices y no se dan cuenta de que están arrasando con su propio futuro y el de sus hijos. Redes, trasmallos, bous, mil y unas artimañas que deberían estar completamente prohibidas y son el verdadero cáncer del ecosistema acuático. No quiero enredarme más en esta batalla perdida, ganada a base de euros y favoritismos políticos, y seguiré con mi relato.

Retomando. Pues eso, era una noche ventosa, con un norte que acobardaría a los pescadores sin curtir. Observando el estado del mar era consciente de que si había pescado, este, entraría sin dudarlo. Mar de fondo, agua revuelta, viento, aunque demasiado, era el cóctel ideal para una buena jornada. Me desplazo a la zona elegida. Según voy montando el equipo me doy cuenta que el viento va a ser un enemigo con el que batallar toda la noche.

Preparo la primera caña con el plomaje máximo que tengo disponible en mi caja y lanzo. Mientras voy preparando la otra caña, observó un picadón en la primera caña. Recojo y pongo en tierra una bonita loba kilera. La noche promete y la actividad también. El viento era muy fuerte, pero las picadas eran tan brutales, que se notaban con total nitidez en el bamboleante puntero de las cañas. La jornada fue muy muy fructífera: 2 lubinas kileras y 5 de medida que se volvieron conmigo a casa. A pesar del viento, me lo pasé como un enano y no tuve ocasión de aburrirme en ningún momento. Por desgracia, días como estos hay muy pocos.


Un Saludo y Buena Pesca!

viernes, 7 de agosto de 2015

Paco is back!

No, no es una mentira.. es él, el auténtico.. PACO is back!!


Dia de semana tranquilo. Estábamos cena barallando sobre distintos temas. De Repente.. Pi! Pi! me llega un whatsapp. Le echo una ojeada y leo "mensaje de Paco". No salgo de mi asombro. Me apresuro a leer el mensaje: "Soy Paco, estoy pasando unos días por aquí. Me voy a acercar al puente a rapalear. Si te animas, acercate". No salgo de mi asombro,

Lo comento en la cena, ya que estaba en presencia de varios de sus familiares, entre ellos, su brodel. Rápidamente me invade la mentalidad pescadora, y me doy cuenta de que estábamos en días de mareas vivas, y a estas horas de la noche, en bajamar total. El puente desde el que Paco tenía intención de pescar se queda prácticamente sin agua. Los chascarrillos fluyen en la conversación a la par que la curiosidad. 

Esto tenía que ser digno de ver. Ni cortos ni perezosos, su brodel y un servidor, decidimos acercarnos a la puesta. Para darle más épica a la historia, decidimos ir en bicicleta, de noche, sin más linterna que una cutre china llevada malamente en la mano, y completamente a oscuras. El camino fue entretenido, aunque un poco largo, ya que hay como unos 2 kilómetros y mi forma física no es precisamente boyante. 

Una vez alcanzado el puente corroboro mis expectativas. Debido al estado de la marea, no esta ni el tato pescando. Aun así, se dibuja una silueta en la lejanía, a mitad del puente. Era el. Allí estaba solo, Paco. Nos acercamos y saludamos. Paco está concentrado en la pesca a tope. De vez en cuando lo veo maldecir, pelearse con su equipo. Sigue luciendo la misma caña del año pasado, de 4 metros, rígida como la pata de una mesa. 


 Consciente de que tiene problemas, le sugiero que me deje probar su equipo. Cuando abro el pick up me quedo de piedra. Había montado el hilo completamente al revés en el carrete. En serio.. yo si lo quiero hacer a drede no soy capaz. Osea, que en vez de recoger, destensaba, y viceversa. No salgo de mi asombro. Cuando miro para abajo, veo que la mitad de la zona de pesca esta en seco, y la otra mitad tiene un palmo de agua. Yo alucino. Lo que más me acojonaba es que estaba en plena noche al lado de una carretera en la cual los coches pasan fostiados. No es un lugar agradable y tranquilo para pescar. Entre tanto su brodel perplejo y asombrado, a la par que descojonado.

Le propongo cambiar de lugar de pesca y me ofrezco a acompañarlo. El accede. Finalmente nos desplazamos a la playa, estuvimos hasta las 4:30 de la mañana sin picada, sin pesca, sin actividad, pero Paco lo pasó como un enano. El es lo que busca en la pesca, evadirse, desconectar, no es el típico pescador ansioso por capturas, es el típico que disfruta del momento, no de los premios. Es todo un personaje, la verdad. No cuesta nada asesorarse y al menos llevar el equipo en condiciones, bien montado al menos... pero bueno, ese es otro tema.

Un Saludo y Buena Pesca!

martes, 4 de agosto de 2015

De pesca con mi Broder

Tarde entretenida, de risas y cachondeo, y premio para alguien que se lo merece

Hoy el día estaba siendo perfecto. Tarde muy agradable de playa, con muy buena temperatura y una compañía inmejorable. Por el lugar estaba mi Broder, que disfrutaba de sus escasas, pero más que bien merecidas vacaciones. Es un apasionado de la pesca, casi tanto como yo, y enamorado incondicional de esta ría y sus mares. Por culpa de su estresada vida laboral y personal apenas puede disfrutar de uno de sus hobbies. Consciente de ello me encargue de tener todo presto y dispuesto para que pudiésemos disfrutar de una jornada de pesca juntos.

Al subir de la playa, después de los rituales pertinentes de merienda, ducha y demases, decidimos coger los utensilios y poner dirección al arenero. La marea no era buena, mas bien mala, pero lo importante era compartir horas juntos haciendo lo que nos gusta.

Llegamos al spot y desplegamos el armamento. Le deje al mando de todo lo referente a surfcasting, ya que yo me había agenciado una minnow en el Decarton y quería experimentar nuevas sensaciones. A el se le veía feliz, intenso y nervioso con cada movimiento de puntero, impreciso pero apasionado a la hora de colocar cebo y lanzar cañas, pero en definitiva, disfrutando como un enano. 

Hubo varias picadas, dos de ellas nos premiaron con dos sarguetes majos de ración. Mi broder estaba a tope, pasándolo bien, desestresado, desconectado, feliz. Casi al final de la jornada, la diosa del mar quiso premiarlo, y dejarle ver, que no se había olvidado de él. Un picadón tremendo en una de las cañas hacía presagiar algo interesante. Y allí estaba mi Broder, con ilusión y la torpeza propia de la inactividad, dándole batalla a tan valeroso esparido. 

Finalmente logró poner en la arena a tan bonito ejemplar que pesó 1 kilo 200 gramos. Se que con su ritmo de vida ocasiones como estas van a ser escasas, pero me alegré mucho de haber disfrutado de este momento en su compañía. Así de orgulloso posaba junto a su premio. Verle desanzuelar el ejemplar fue otro show, ya que el sargo estaba tragado hasta el infinito y sus habilidades desanzuelezadoras están muy oxidadas. 


Un Saludo y Buena Pesca!

domingo, 19 de julio de 2015

Tarde Épica con el Capitán

Tarde Épica, tarde de récord, con el Capitán de protagonista, como no podía ser de otra forma.


Hoy hacía un día feucho de verano. De esos que se encapotaba por momentos, al rato descargaba algo de lluvia, seguidamente venía un vientecillo frío del sur, luego asomaba tímidamente el sol. Un dia de esos de quedarse a jugar a las cartas con los amigos o dormir una plácida siesta sin apremio por levantarse.

Yo estaba lánguidamente en mi tumbona, escuchando música y dejándome teletransportar etéreamente. Al fondo veo venir al Capitán, manos a la espalda, dirigiéndose a mi posición. Rápidamente me larga: "Que! parece que está la tarde pocha. Te apetece ir a dar una vuelta hasta la playa?". Viendo el percal, y teniendo algo de miñoca sobrante de la noche anterior en la nevera, no dude en responderle afirmativamente y acompañarlo.

Cogimos los bártulos y pusimos rumbo a la playa. A medida que avanzabamos, discernía que no iba a ser una velada muy fructífera. El mar estaba como un plato, solamente roto en ocasiones por alguna ligera brisa que azotaba la superficie, y para más inri, transparente como una vidriera. Por mi experiencia personal, estos son los elementos ideales para hacerse un bonito bolo.


Aun así, no teníamos nada mejor que hacer, y dar un paseo por la orilla, y pegar unos lances no era mala opción.  Llegamos al spot elegido, montamos el tenderete y a esperar. 



La actividad era prácticamente nula. En alguna ocasión algún sarguito pequeño tentaba el suculento manjar miñoquero, pero sin éxito. Las horas se fueron consumiendo, al igual que los cigarrillos que ayudaban a colmar nuestra ansia.

La marea, que tan esplendorosa y llena lucía cuando llegamos, se empezaba a deshinchar como un globo de feria. El sol comenzaba el camino hacia su cama en el horizonte, y como nosotros no veníamos ataviados con enseres necesarios para la pesca nocturna, se mascaba la hora de la retirada.

Se lo comento al Capitán, y el me da su visto bueno. Comienzo el ritual de recogida. Guardo una caña y guardo la otra, mientras el Capitán solo había dado cuenta de una de las suyas. Le ayudo a recoger la primera para que vaya a recoger la segunda. Mientras estoy guardando la caña en el portacañas escucho al fondo "Ostias! Ostias! esto tira! esto tira!". Alzo la vista y veo al Capitán peleando con su vara, con el puntero doblado exageradamente.

La primera impresión que me da es: una de dos, o ha enganchado, o trae un bonito matojo de algas. Pero pasados unos segundos, observo como lo que hay al otro la del hilo tira.. y de que manera. La caña bombea de manera exagerada, el Capitán se mantiene firme, sin perder los nervios. Hace acopio de su experiencia y sabiduría entablando una feroz lucha con su contendiente. En principio pensé que seria una raya/uxa, pero una vez visto los arranques y acometidas que propinaba el animal, lo descarte.

Me apresuro a su ubicación para auxiliarle en lo que fuese necesario. En una de estas, vemos una aleta asomar en tumultuoso torbellino que provocaba el espécimen. Ahí nos quedó claro, era un pez. El Capitán prosigue su lucha sin tregua. Cuando ya tiene a su contrincante cerca de la orilla, procede a arrastrar hacia atrás todo el equipo para acabar varando su trofeo en la arena. Cuando lo vemos, no damos crédito:


Una hermosa loba de 2 kilos 100 gramos había consagrado el mito del Capitán. Así de orgulloso posaba con la lubina que tan honorable batalla le había agraciado. Su sonrisa y languidez dejaba entrever que había acrecentado su mito. Era consciente de que se había superado y que, el listón de sacar una pieza que superarse la suya, era cada vez más difícil en estas aguas. 

De regreso la felicidad reinaba. También la incredulidad. Sinceramente yo no daba un duro por sacar nada decente hoy, y en el último lance, en la última recogida, la pesca nos dejó una grata sorpresa y un recuerdo imborrable. 



Un Saludo y Buena Pesca!

jueves, 16 de julio de 2015

Comienzo Surfcasting 2015

Comienza la temporada de Surfcasting del 2015 con muchísimas ganas!!!

Pues si, ya está aquí, ya llegó. Que ganas tenía de llegase ya por fin estas fechas. El invierno ha estado bien en cuanto a pesca, la verdad es que no me quejo, pero la sensación de poder pescar en manga corta por la madrugada no tiene precio. 

Tenía ganas de pisar arena. La pesca en invierno para mi es totalmente urbana, desde puertos, escolleras o paseos. Además, solo tiento a cefalópodos, y tenía el ansia viva de tocar escama.

La temporada ha comenzado de manera casi inmejorable, obteniendo el mayor sargo que sacado del mar hasta la fecha con un peso de 1 kilo, otro que rondaba el medio kilo, y tres más de ración. 

Esperemos que sea el inicio de unas grandes veladas.


Un Saludo y Buena Pesca!

domingo, 10 de mayo de 2015

Un bonito día sin premio

Hoy fue un día especial, sobre todo para mi piratilla, ya que celebramos su cumpleaños. Aprovechando que nos juntamos todos, decidimos no dejar pasar la oportunidad, y hacer unos lances.

Esta última semana ha sido bastante movidita, cansada y emocionante. En la misma he tenido el cumpleaños de dos de las personas mas especiales en este mundo para mi: mi Piratilla y mi Broder. Con el cansancio corporal por bandera, y llegado el sábado, tenía la intención de todos modos de tratar de organizar una pequeña velada de pesca.

Durante la semana estuve chequeando las condiciones del tiempo a diario para esa noche. A medida que se aproximaba la fecha todo se tornaba a nuestro favor. La situación de la marea, el estado del viento y la temperatura nocturna se presumían más que aceptables.

Finalizado el evento cumpleañero decidimos pertrecharnos y poner rumbo a algún muelle. Mi intención en un principio era de no llevar a mi Piratilla. Acababa de tener tres días intensos de celebraciones y se le veía notablemente agotado. Aun así, de camino a casa, insistió con todas sus fuerzas para que le dejase acompañarnos. Intente ponerle mil y una trabas, negociar con el, pero fue imposible. Al final no tuve más remedio y le deje venir.

Bajamos al muelle en el que suelo pescar y conozco en profundidad. No había mucha gente, pero si la suficiente, para que no pudiésemos estar cómodamente debido a las reducidas dimensiones del mismo. Así que decidimos poner rumbo a otro pesquero cercano y observar el percal. Llegamos. No había demasiada gente y las extraordinarias dimensiones del lugar hacían del sitio un emplazamiento ideal para nosotros.

Nos instalamos y comenzamos con el batiburrillo de lances. Mi Broder estrenaba caña nueva y yo estaba más ansioso por que él tuviese alguna picada o alguna captura, que por lo que un servidor pudiese conseguir. También tenía la ilusión de que mi piratilla consiguiera algún ejemplar. Neptuno no quiso agraciarnos esta noche. 

A la media hora de estar pescando el Patrón comenzó a agobiarse un poco. No tardo en probar nuevas postas e indagar interrogando a los lugareños. Las expectativas no eran alentadoras. Solo uno de ellos habían conseguido clavar un choco de pequeño porte, y para colmo, se le había soltado una vez llegado a la superficie. Esta noche noté al Patrón bastante desencajado y desanimado, la primera vez que lo veo de esta guisa desde que pesco con el. Llevaba un par de semanas sin apenas capturas, y eso para un lobo de mar como es él, es algo impensable.

Al menos, entre mientras, mi Broder y mi Piratilla decidieron quitarle importancia a la nula acción de pesca y posaron para la prensa al mas puro estilo Jack Sparrow:


También aprovechamos para hacernos un par de instantáneas y dejar constancia del evento:


La noche se fue consumiendo, y visto el percal, mi piratilla decidió que ya había tenido suficiente. Lo entendí perfectamente, hasta yo mismo me estaba comenzando a aburrir. Vino mi mujer a recogerlo, y aprovechando la circunstancia, mi hermana aquejada de un dolor en el brazo también dio por concluida la velada. El Patrón hizo lo propio y se diluyo en la oscuridad de la noche con la misma cara de contrariedad que lucia al principio. Las dos veces que lo traje a pescar a este pesquero no tuvimos ninguna suerte... que le vamos a hacer.

Finalmente nos quedamos un rato mas mi Broder y yo. Fueron unos momentos muy agradables de relajación y charla. Al rato se empezó a levantar una leve brisa que comenzaba a ser bastante incomoda y sumisamente recogimos los bártulos y nos fuimos.

Fue una pena que nuestros amigos cefalópodos no quisieran brindarnos una noche de pesca animada y gloriosa. Aun así me quedo con el rato divertido que pasamos, y en el plano pesquero, me alegre bastante de que la nueva versión de los luminosos que estoy desarrollando aguantasen perfectamente toda la noche.

Espero que cuando pongamos rumbo en breve a aguas Arousanas, podamos repetir la experiencia, pero esta vez manchando nuestras manos de tinta.

Un Saludo y Buena Pesca!

sábado, 2 de mayo de 2015

Expectativas verano 2015 y presentación de la versión 4.0 de los luminosos

Debido al mal tiempo reinante en estas fechas, quiero aprovechar para plasmar mis objetivos para este verano, y de paso, presentar la nueva versión de mis luminosos.

Tengo muchas ganas de que llegue el verano para comenzar la temporada de surfcasting en aguas Arousanas. Solo falta un mes para dar el pistoletazo de salida, y cada día que pasa, mi hambre de arena y sedal se incrementa. Después de haberme fogueado a conciencia en invierno, anhelo también tener algunas veladas a la caza y captura junto al Patrón de nuestros amigos cefalópodos, y poder demostrar lo aprendido en los últimos meses.

Este año mis expectativas van un paso más allá. Una vez alcanzadas las que podríamos considerar metas básicas, es el momento de alzar un poco las miras y luchar por conseguir retos más difíciles. Los enumerare:

1.- Capturar una lubina de más de un kilo.
2.- Capturar un sargo de más de medio kilo.
3.- Capturar mi primera dorada.
4.- Superar mi récord de 6 capturas de cefalópodos en una sola sesión.
5.- Lograr que mi Broder capture un calamar y un choco, o al menos, uno de ellos.

Va a estar difícil. Dependerá en parte de la suerte en las capturas. El reto que veo más complicado, es el de la dorada, ya que dicho ejemplar, rara vez se deja ver por estas aguas. El de mi Broder es el más divertido de todos los que me he marcado, espero que me ayude y ponga todo de su parte. Será complicado completar la lista, pero aún así afronto el desafío con muchísima ilusión y con todas las ganas del mundo.

Aprovechando esta entrada, voy a exponer la nueva versión de mis luminosos: Versión 4.0. Aquí dejo unas instantáneas de los susodichos:



Esta versión la he desarrollado íntegramente basándome en las experiencias que el Patrón y mi hermana me han ido comentando a lo largo del uso de la versión 3.0. Para mi era válida, de hecho, yo he estado utilizándola la mayor parte del invierno con resultados muy satisfactorios. Pero hay un pequeño problema, o gran problema, depende como se mire. Al tener los hilos de cobre en contacto con agua salada al final ocurre lo más imaginable... si no tienes mucho tiento entrelazándolos para que hagan contacto, se acaban rompiendo mucho antes de que la pila se agote.

Así que mi cabecita comenzó una vez más a darle vueltas al asunto. Pensé en la forma de que no quedase ningún componente eléctrico a la vista. Al final lo más sencillo era lo mejor y más práctico. Hice un par de modelos y me baje al muelle a probarlos. Primer fiasco. Como me ocurriera en versiones anteriores, fallaba la estanqueidad. Volví a casa, analice el error y rehice el invento. Al día siguiente volví a intentarlo. Segundo fiasco. Esta vez fui consciente del fallo.

Al día siguiente procedí a manufacturar un par de luminosos mas y bajar al muelle para testearlos. Estuve tres horas con ellos pescando y no dieron ningún síntoma de error. Las sensaciones fueron buenas, pero por desgracia debido al empeoramiento del tiempo y por otras circunstancias, no pude volver a bajar para continuar con las pruebas.

Espero darle un par de ejemplares al Patrón y a mi hermana para que les metan caña y me comenten como van. Ellos son mi mejor laboratorio de pruebas posible.

Un Saludo y Buena Pesca!

sábado, 18 de abril de 2015

Un Día Estupendo

Hoy fue un día maravilloso de reunión familiar. Aprovechando que celebrábamos el cumpleaños de la Gran Mama, y estábamos en territorio Arousano, decidí no dejar pasar la oportunidad y hacer unos lances en buena compañía.

El día era espectacular, comienzo de semana santa y un solazo imponente. Temperatura más que agradable. Marcamos hora y lugar para comer toda la familia junta y celebrar el cumpleaños de nuestra querida madre, La Gran Mama. Llegamos, aparcamos y de camino a la zona elegida tuve mi primer percance, perdí uno de mis dos pinchos para clavar la caña en la arena. Ni tiempo me dio a estrenarlo en condiciones, que le vamos a hacer.

La comida en si fue muy amena y agradable, con un ambiente muy distendido y jovial. Después la celebración, con el soplo de velas y entrega de regalos correspondiente. Finalizada la sobremesa decidimos acercarnos a la playa, unos para gozar del sol y el ronroneo del sonido del mar, y otros, para mojar sedal en nuestras amadas aguas arousanas.

El Patrón venía advertido y se trajo una caña. Yo como tenia dos, y no iba a ponerme en plan serio, decidí ofrecerle el manejo de una de ellas a mi Broder. El encantado aceptó la propuesta. Como cebo, me traje un batiburrillo de manjares para probar suerte: una caja de coreana, un calamar, un choco y un par de langostinos. Nos asentamos en la zona elegida y procedimos a armar los artilugios. Asesore al Patrón y le ayude a acomodar el bajo de su caña. En cuanto a la pesca de calamares es un crack indiscutible, pero en estos menesteres, aún está muy pez. Mi Broder mas o menos se manejó solo... el que tuvo, retuvo. Aquí dejo un par de instantáneas de nuestra posta:


Comenzamos con los lances. El resto de la familia nos jaleaba mientras disfrutaban a cuerpo descubierto, tumbados en sus toallas, de las primeras caricias del año de nuestro querido amigo Lorenzo. Las condiciones de pesca no era muy buenas. La marea comenzaba a desinflarse y la cantidad de lechuguines flotantes que se afanaban en enredarse en nuestras líneas era considerable. El espectáculo inicial lo proporcionó el Patrón, con la pelea con su caña y sus increíbles lances de 10 metros. Bromas aparte, la caña que tenía era muy corta y para más inri le faltaba el tramo de la punta. Aun así no se desanimó y siguió intentando con esmero.

Pasado un rato decidí comprobar el estado de mi cebo. Recogí y los familiares presentes observando el bamboleo del sedal, se crearon altas expectativas. Yo daba por hecho que dicho movimiento oscilante se debía simplemente a la construcción plana de los plomos. Mi sorpresa fue inmensa cuando a pocos metros de la orilla empiezo a notar tirones. No salía de mi asombro. Seguí recogiendo y al llegar a la arena me quede perplejo al contemplar una hermosa lubina abrazando mi anzuelo. Fue increíble. Menudo momentazo y anécdota nos regaló este maravilloso ejemplar. Aquí dejo testimonio del mismo:


Luego con la bajada del mar, probé suerte con los otros tipos de cebo. El resultado fue nulo. Mi Broder tuvo una bonita pelea con un enganche, y fue auxiliado diligentemente por el Gran Capitán. El Patrón continuó su maratón particular en la disciplina de lanzamiento de plomo en estilo libre. Finalmente, decidimos finalizar la sesión y recoger todo. Aproveche el instante para enviarle la foto de la lubina a mi gran compañero de surfcasting, Ángel, para ponerle un poco los dientes largos. El respondió amistosamente y con gran anhelo de perspectivas para dentro de un par de meses.

Como me había sobrado bastante cebo, decidí devolver al mar lo que salió del mar, así que me acerque a la orilla y deposite todo en el agua. Entre el batiburrillo de carnada que llevaba, me había sobrado un choco entero. Cuando mi padre, El Gran Capitán, se acercó a lavar los pies y vio el cefalópodo flotando en el fondo, no dudo en vacilar al Patrón. Lo llamo a gritos y le dijo que bajase con algo punzante que veía un choco nadando en el agua. El Patrón raudo y veloz, cogió uno de mis pinchos y respondió apresuradamente a la llamada. No fallo la estocada e hizo presa a tan escurridizo ejemplar. El cachondeo, vacile y risas fueron grandiosos hasta que se dio cuenta del entramado. No obstante, previamente, posó así de feliz para la foto pertinente:

Luego fuimos de recogida a tomar algo a un bar del pueblo. Ya que estábamos allí, entre el Patrón, mi Brodel y yo, decidimos prolongar la jornada de pesca e intentar probar suerte por la noche con nuestros amigos cefalópodos, eso si, previo consentimiento de nuestras respectivas. Aproveche el evento y me lleve a mi piratilla con nosotros. Caída la noche, nos personamos en el muelle. Nada más bajar del coche las perspectivas eran nefastas. Soplaba un viento del norte huracanado que hacía imposible la práctica de la pesca. El Patrón nos instó a cambiar de muelle para comprobar si dada la distinta orientación de este último el viento era menos dañino. Soplaba un pelín menos pero seguía siendo demasiado.

En el muelle se hallaba solamente un viejecito peleándose a capa y espada contra las feroces ráfagas endemoniadas del Dios Eolo. Encomiable su actitud, pero un tanto suicida. Como es de recibo, el Patrón se aproximo a pie de pesquero a comprobar las condiciones y a contrastar sensaciones con el paisano. Entre mientras, Zas!!! el viejecito noto una picada, pero una picada brutal. Nos rogó que le acercásemos un ganapan o algo similar. El Patrón cogió su artilugio y se apresuró a auxiliarlo. Pedazo de pepino que había clavado el señoriño. El Patrón no dudo en hacerse una foto con semejante ejemplar:



Ya habíamos decidido no pescar, pero visto lo visto, sabía de sobra que el tren había comenzado su camino y era imposible pararlo. Dicho y hecho. El Patrón una vez finalizó de ayudar al viejecito, se dirigió presto a coger su caña. El gusanillo de la pesca le había asestado un golpe fatal. Pues nada, mi Brodel y yo visto lo visto, no tuvimos mas remedio que desenfundar las armas y acompañarlo. Mi piratilla en un principio se quedo en el coche, pero finalmente, se animo y decidió acompañarnos:


Coger, no cogimos nada. Ni picada. El viento seguía siendo indomable. Aun así, lo pasamos en grande. El cachondeo era constante, los vaciles al "novato" de mi Broder eran tremendos a la par que su respuesta. Mi piratilla nos regaló grandes momentos como este:


Más tarde, cambiamos de caladero. Allí se estaba de lujo ya que se encontraba completamente al abrigo del vendaval que nos asolaba. Las risas y el cachondeo continuaron. Visto que no teníamos picadas, nos afanamos en realizar una divertida competición de lances. Llegó a tal punto la relajación que hasta cometí un error de novato no cerrando la presilla del gancho y perdiendo una potera por el camino. La única pena es que mi Brodel no capturo nada, misión que nos habíamos encomendado el Patrón y yo, pero bueno, espero repetir noches como esta y desvirgarlo de una vez por todas... aun sigue creyendo que lo de las luras es un mito o una leyenda urbana. Grandioso día con la mejor compañía posible.

Un Saludo y Buena Pesca!

sábado, 28 de marzo de 2015

Prueba del equipo de Surfcasting

Llevaba tiempo deseando poner a prueba el equipo de surfcasting y hoy no deje pasar la oportunidad

En todo el invierno me he ido agenciando el material necesario para ir a pescar a la playa en verano. Me compre un par de cañas modestas (debido a mi presupuesto) que no obstante tienen pinta de poder cumplir con su cometido, un par de pinchos altos para anclar las mismas en la arena y elabore junto a mi piratilla unos cuantos plomos caseros hechos de cemento.

Hoy hacia bastante frío por la mañana. Nos levantamos, desayunamos, acicalamos y deje al peque en el cole. Como este ultimo esta a la orilla de la playa, y la sangre me venia hirviendo desde hace tiempo, decidí comprobar todo el equipo in situ.

Me acerque a la tienda de pesca y compre una sabrosa cajita de cebo.. ya que iba a mojar los anzuelos, que mejor que con algo colgando de ellos, no?. Aparque cerca de la playa y saque todo el arsenal. Las pocas personas que rondaban por el lugar me observaban desde el altar del escepticismo.. estará enfermo por la pesca o simplemente estará loco? Yo creo que reúno un poco de ambas.

Pues nada, después de montar todo el tenderete, hice un par de lances de prueba. Tenia muchas dudas en cuanto a la respuesta de los plomos. Ciertamente son mejorables, sobre todo en su forma, debí de haberlos hecho un poco mas redondeados, ya que en el lance se percibe que ejercen alguna resistencia al viento y en la recogida la sensación es de bamboleo constante, impidiendo conocer con exactitud si traes alguna pieza al final del sedal. Si tengo paciencia y tiempo, intentare hacer otra remesa antes de que comience la temporada y perfeccionarlos un pelín. Como era de esperar, no tuve ninguna picada.

No voy a negarlo, fue la excusa perfecta para grabar mi primer video y subirlo al blog. Aquí dejo mi primera toma de contacto con este campo audiovisual. Nótese el estilazo, gran semblante y los pulidos movimientos del lanzador.


Un Saludo y Buena Pesca!

domingo, 22 de marzo de 2015

Luminosos Caseros... v 3.0 Batalla final

Mucho esfuerzo, horas de trabajo, quebraderos de cabeza... pero finalmente, parece que todo mereció la pena.

Bastante tiempo ha pasado ya desde que el haz de luz de la bombillita del ingenio inundara el interior de mi tenue cerebro. La idea broto entre mis manos como si de una criatura recién nacida se tratase. De lo que no me había percatado en aquel instante, es que esa chispita de creación inicial, me mantendría enfrascado tan obsesivamente.

La primera remesa fue emocionante. Era la versión 1.0. Primero ingeniar un buen diseño, reducido en tamaño, pero grande en prestaciones. Horas y horas dándole vueltas a la cabecita, jugando con las formas, texturas y anticipándome a las posibles agresiones en los distintos escenarios de uso. Luego vino la épica de encontrar los materiales oportunos que se amoldasen al bajo coste pensado desde un principio. Mas tarde el tour de tiendas de electrónica, chinos y ferreterías en busca de los escurridizos objetos necesarios para la consecución de tan espléndido artefacto.

Llego el momento de la primera prueba en vivo. Esa noche recuerdo que fui a pescar emocionado, nervioso y ansioso. Me importaba un pimiento coger algún ejemplar, lo que realmente me interesaba era observar como mi criatura nadaba, interactuaba y se desenvolvía en su estado natural. Fue un fiasco. No duraron ni media hora en "hacer aguas". Subí del muelle enojado pero con la la inercia de tratar de mejorar el artilugio en las próximas fechas. Me di cuenta que había cometido un par de errores y sabia que tenia margen de mejora. 

Para la versión 2.0 estudie a fondo el global del invento. Puse mucho mas énfasis en la estanqueidad y dote al mecanismo de la fiabilidad eléctrica de la que carecía la primera versión. Los monte y los revise mil y una veces. Quería estar seguro de que esta vez era la buena. Baje al muelle con ellos confiado en mi éxito. Allí estaba yo, probándolos con el pecho hinchado. Los lugareños no daban crédito a semejante cachivache. Llevaba una hora, todo iba sobre el plan previsto... pero a la hora y media.. Plaf!! primeros síntomas de fracaso. No me lo podía creer. Cambie uno por otro y continúe las pruebas con la esperanza de que el primero me había salido defectuoso. Me equivoque. Al rato, el segundo presentaba los mismos síntomas.

Me fui para casa con una mezcla de sensaciones negativas... frustración, impotencia, incredulidad, etc. Tantas horas y tanto trabajo no se merecían ese premio. Fue un punto de inflexión. Desde ese momento decidí tomármelo con filosofía, analizar fallos con frialdad  y buscar posibles alternativas.

Finalmente nació la versión 3.0. Antes de poner en circulación esta criatura dedique muchas horas a tratar de comprender la naturaleza de los errores. Los momentos previos a dormir los dedicaba a repasar mentalmente todo el proyecto anhelando encontrar el escollo que me impedía avanzar. Después de tantos baralles creo que di con el clavo. Le envíe unos cuantos ejemplares al Patrón para que les metiese "caña" y me contase sus impresiones. Su informe fue totalmente positivo. Me encargue personalmente de hacer lo propio y para mi satisfacción personal, el objetivo estaba cumplido.

Ahora si, ahora puedo clamar a los cuatro vientos.. es una GOZADA pescar con esto. Ahora que son fiables, es una verdadera maravilla disfrutar de la pesca de los cefalópodos con este invento. Tienes control absoluto de todo lo que haces. Potencia al 100% desde el inicio de la jornada al final, no como los químicos que a los 10 minutos no se ve nada. Aun tengo que comprobarlo, pero el Patrón asegura que con ellos se tienen mas capturas que con los comerciales tradicionales. De ser así, seria doble premio para el artefacto. También logre ajustar bastante el coste del asunto. Salen por el triple que los comerciales, pero duran 20 veces mas y con una potencia envidiable.

En principio hice un batiburrillo de colores, pero dada la experiencia, creo que dejare las opciones en verde, blanco y azul. La curiosidad que genera en los demás pescadores es manifiesta. Llaman tanto la atención, que muchos han querido comprarme algún ejemplar. Alguno me sugirió seriamente patentarlo debido a lo novedoso del invento y que, seguramente si pasa por delante de las narices de alguna empresa, no dudara en copiar el invento. Por ahora seguiré con mi política de uso personal, sinceramente no creo que esto me desgrane suficientes beneficios como para dedicarme en exclusiva a ello. De todos modos estoy muy contento de haberlo conseguido. Espero disfrutar de ellos durante muchos años junto a mis mas íntimos compañeros de pesca.

Un par de fotos de un orgulloso padre de sus preciosos hijos: Versión 3.0... la batalla definitiva:



Un Saludo Y Buena Pesca!

domingo, 15 de marzo de 2015

Por aire, tierra y mar

No tenía muy buena pinta hoy el cielo, pero aun así, picado por el gusanillo de la pesca, decidí bajar a observar el percal. Lo sucedido ni me lo podría haber imaginado.

Me pase toda la tarde examinando con inquietud el cielo y el estado del viento. Los pronósticos no vaticinaban buenas condiciones. La marea era buena, de esas que le gusta a un servidor, subiendo a última hora del ocaso para aprovechar ese par de horas de locura pesquera que se suelen suceder en esa franja. Lo malo era el viento. Fuerte en líneas generales y aun encima con rachas muy potentes que parecían querer arrancar los árboles de sus raíces. No obstante, parecía que la ventolera amainaba por momentos, pero era solamente un breve espejismo en el desolado desierto de mi ilusión.

Aun así decidí darme una vuelta por el muelle para matar el ansia y darme de bruces con la cruda realidad. Cuando arribe me quede sorprendido. A medida que me aproximaba al lugar de pesca vislumbre un par de siluetas al fondo. Eran dos intrépidos pescadores que habían decidido retar a las fuerzas de la naturaleza, y caña en ristre, luchar ferozmente contra las rachas endemoniadas enviadas por el mismísimo Dios Eolo para lograr su objetivo... capturar a alguno de nuestros amigos cefalópodos.

Sinceramente la pesca era completamente inviable. Lanzaban de frente, y antes de que los señuelos acariciasen el agua, se habían desplazado como 30 metros a su izquierda. La sensibilidad en sus punteros era nula, ya que estaban en una lambada continua danzando al son del viento. Me acerque a saludar y comentar la situación. Uno de ellos se lo tomaba con humor e ironía, y proclamaba que pensaba prolongar la pesca cuatro o cinco horas más.

De regreso al coche observe una zona en la que probé suerte un par de veces el año pasado, y que si bien apenas me había dado capturas, al menos hoy parecía que podría ser la localización más propicia para tener el control de la caña. Ya que estaba a pie de muelle, decidí sacar el material de trabajo y hacer unos cuantos lances.


Me posicione y comencé a calibrar los lanzamientos. La sensación era mala, pero no tan extrema como en la que se encontraban los otros dos valientes de la punta. Me sentía un poco desorientado, ya que por culpa de lo agitado del mar, y que de frente tenía el reflejo de un foco en la superficie del agua, en la recogida, apenas podía ver y percibir la situación de mi señuelo... básicamente estaba pescando a ciegas. Aun así me anime a seguir probando suerte durante unos minutos.

Finalmente abrí los ojos y me di cuenta que no era día para mojar sedal. Como de costumbre antes de recoger procedí a realizar mi ritual de "un pitillo y me voy". A mitad de cigarro, lanzo como suelo hacer normalmente. Cuando me dispongo a cerrar el puente de mi carrete, de repente me quedo perplejo, el hilo comienza a salir a una velocidad vertiginosa, yo no doy crédito.. "Pero.. pero... que coño esta pasando???", levanto la vista y observo como mi luminoso atraviesa por el aire a media altura una distancia de unos 30 metros en menos de dos segundos. Parecía una estrella fugaz a ras de mar. Se eleva por encima de una embarcación y acto seguido oigo un fuerte graznido. Entre la perplejidad y la angustia del momento, mi cerebro se empieza a desperezar del colapso inicial y comienza a atar cabos y a reaccionar. Instintivamente le doy un brusco tirón a mi caña y resuena otra vez el graznido. En ese momento contemplo como mi luminoso desciende rápidamente de su estado de levitación sobrenatural y se posa bruscamente en la superficie del mar.

Pasados unos segundos me di cuenta de lo acontecido. Una de dos: o en el lanzamiento le había atinado a una gaviota y mi señuelo la hizo presa, u otra posibilidad es que, esta misma viese el señuelo, lo confundiese con un pez y quisiera llevárselo por aire a un lugar más tranquilo para llenar su bandullo. Increíble, la verdad. No salía de mi asombro.

Una vez recuperado del susto inicial, se presentaba un escenario delicado. Tenía como unos 50 metros de sedal danzando descontroladamente al ritmo impredecible del fuerte viento, una embarcación entre medias, y las condiciones lumínicas eran ciertamente escasas. Cogí aire, y me dispuse a recoger con mimo y cuidado. Cuando comencé a sentir ya un poco de tensión entre mi caña y el sedal me alivie un poco. Notaba que empezaba a hacerme dueño de la situación. Craso error. En los últimos metros para mi desesperación, me fije que entre mi señuelo y mi caña se interponía el cabo de la embarcación.

Aproximo lo más cuidadosamente que puedo la potera al cabo, para tratar de darle una fuerte sacudida para librar el cordamen. De lo que no me había dado cuenta, es que la línea ya estaba enredada en susodicha cuerda. Peleo, y peleo, pero cuanto mas tenso, mas se enreda. Me tiro así cinco minutos, sin avanzar ni retroceder. Entonces intento buscar otra solución. Voy a donde está el cabo anclado a tierra e intento darle vueltas desde allí como si de una comba se tratase. Mis intentos son totalmente estériles, y como premio, me llevo una buena mazadura en uno de mis dedos contra la piedra causándome un buen tajazo. La sangre comienza a chorrear por mi mano y lo peor de todo es que no encuentro solución alguna a este despropósito.

Cojo un pañuelo y me hago un apaño al estilo del último superviviente para que la herida deje de emanar líquido globuminico. La embarcación se encuentra a escasos 5 metros de la orilla pero a mi me parecen kilómetros. Como ultimo recurso intento arrimar la chalana a base de tirar de la cuerda. Nada, no se aproxima ni medio metro. En ese momento me vinieron las palabras del Patrón a mi cabeza "Pra acercar unha barca anclada cun morto a orilla, teñen que haber duas cordas pra facer o xojo..." pues nada.. yo solo veía un cabo y no encontraba ni pies ni cabeza a la situación. Por cierto, todo esto dentro del contexto de estar asediado por el fuerte oleaje y un poderoso viento.

Finalmente claudico. Opto por forzar y romper todo. Allí quedo mi luminoso en la proa del barcucho cuan farolillo verbeneo. Me fui del lugar con una experiencia nueva, una lección aprendida, una potera y luminoso menos.. Ah! y un dedo magullado, casi tanto como mi ego.  He aprendido que el peligro esta en el mar (algas, rocas y trasmallos), tierra (cabos y viejunos territoriales) y ahora en el aire (gaviotas glotoneras)

Un Saludo y Buena Pesca!

martes, 10 de marzo de 2015

Conociendo a tus enemigos: Los Trasmallos

Hoy se presentaba una noche agradable, sin viento y con temperaturas decentes. Decidí bajar al muelle y, aparte de la pesca, me lleve una experiencia nueva.

Todo hacia presagiar una buena jornada. No quise dejar escapar la oportunidad y puse rumbo al muelle. Me establecí y comencé la pesca. No había mucha gente, éramos solamente cuatro, ciertamente raro, ya que las condiciones eran más que aceptables.

Comencé con el batiburrillo de lanzamientos. En menos de una hora tuve mucha suerte sacando cuatro buenos ejemplares del mar. Más tarde, observando que el ritmo de capturas había decaído bastante, opte por hacer lances lo más lejanamente posible para tratar de tentar a los cefalópodos mas tímidos. En uno de ellos noto un enganche fuerte.  La verdad es que me quede bastante sorprendido, ya que venia a media agua y me extraño bastante. 

Total, fuerzo el tema y rompo todo, luz incluida. Me resigno y me dispongo a montar otra vez todo el tinglao. A nadie le gusta perder sus aparejos, pero ciertamente en esta ocasión, tampoco me preocupo demasiado. Perdí una potera de 9€ Yo-zuri crystal, la cual había gozado de multitud de oportunidades y jamás me había dado captura alguna. Realmente me fastidió más por el luminoso que por otra cosa, ya que sea por un motivo u otro, no doy agotado la pila de ninguno.

Pues nada, arreglo el desaguisado y continuo con la pesca. Entre mientras, uno de los veteranos allí presentes comienza a resoplar y a despotricar a los cuatro vientos. Yo lo observo y sigo a lo mío. Poco después posa su caña en el muelle y se dirige al coche. Vuelve con una caña larga, sedal muy grueso y nada más que un plomo grande al final de la línea. Como mi luz quedó en el fondo enganchada, se veía perfectamente desde tierra, así que el hombre comenzó a lanzar contra ella. Tras varias tentativas, logró su objetivo, consiguió amarrar con el plomo lo que allí se hallaba en el fondo.. Me pidió ayuda para arrastrar el nylon de su caña.

Comenzamos a tirar y tirar. Poco a poco la luz se iba aproximando lentamente al muelle. Seguíamos ahí, dale que te dale.  Llegó un momento que el tinglao ya no se movía más, pero cuando tensábamos el sedal, se podía ver el extremo de un trasmallo.. "Malditos cabrones!" rezaba el, que se lamentaba por que algún gilipollas ávido de avaricia pesquera, lanzaba sus trasmallos a menos de 30 metros de la orilla. Yo no me lo acababa de creer, no había ni boyas de señalización ni leches. El me comento que esto es así, ni reglas ni control, la ley del más fuerte. Aun así, no se quedó tranquilo con moverle el artilugio al marinero cabrón de turno.

En ese instante se acercaron dos muchachos jóvenes para pescar. Observando la jauría que se había montado alrededor de tan maléfico cachivache, se acoplaron en las labores de lucha contra el enemigo. Finalmente, con el esfuerzo de todos, logramos sacar el extremo del trasmallo a la superficie.  Nuestro compañero veterano, ni corto ni perezoso, fue al coche, cogió un cuchillo, y procedió a asestar el mayor daño posible a golpe de cortes en las cuerdas al trasmallo del demonio.

Finalmente sin darme casi ni cuenta, tuve una noche muy buena en cuanto a capturas, de las mejores desde que pesco aquí, pero la verdad es que todos nos pasamos mas tiempo entretenidos intentando joder al que nos esta jodidendo, que pescando. Me hubiera gustado ver la cara de gilipollas que se le habrá quedado a la mañana siguiente al desgraciado que no respeta las normas ni las distancias. Foto de las capturas:


Un Saludo y Buena Pesca!

domingo, 8 de marzo de 2015

Comienzo de Temporada en Arousa

Ya tenía ganas, muchas, de hacer una jornada de pesca con el Patrón. No defraudo la cosa.

Llevábamos tiempo planeándolo, buscando fecha y buenas condiciones climáticas. Con la proximidad de la primavera, los días se tornan más soleados y agradables, momento idóneo para lanzarnos a la aventura.

Para el evento planificamos un fin de semana en su tierra, lugar donde un servidor renació como pescador de cefalópodos y que siempre le trae muy buenos recuerdos. Las condiciones de la marea no eran ni de lejos las mejores, pero con el ansia viva que nos recorre el cuerpo, no íbamos a permitir desaprovechar esta ocasión.

Quedamos para comer el sábado acompañados por mi padre, el Gran Capitán, y mi madre. La comida hubiese sido amena si no fuese por una manada de energúmenos que comían a nuestro lado y que hacía imposible mantener una conversación.. Hay gente que ladra en vez de hablar. No obstante recibimos una estupenda noticia de alguien muy especial para mi y que va a probar las mieles de la paternidad en breve.

Una vez concluida la ruidosa comida, y con el consecuente dolor de cabeza debido a los graznidos de los comensales que teníamos al lado, decidimos ir a dar un paseo por la playa en la cual hago surfcasting en verano. Como a mitad de trayecto se encuentra la tienda de pesca, decido intentar hacerme con algún cebo vivo para tentar suerte. Justo cuando llegamos el dueño acababa de cerrar el chiringuito, pero poco le hizo falta al Patrón y su don de persuasión innato, para que nos abriese la tienda y nos sirviese una bandeja de rico manjar para los peces.

Llegamos a la playa y me dispuse a montar el tenderete. No llevaba las cañas de surfcasting y me di cuenta que las cañas de Egging que tenía, eran demasiado delicadas y endebles para este menester. Para más inri el mar estaba infestado con revoltosas algas que se obcecaban en enredarse en nuestros bajos. Fue imposible hacer nada, pero en unos meses me vengare personándome de nuevo en el lugar con el equipo y las condiciones oportunas.

Fuimos a merendar a casa del Patrón. Yo miraba cada minuto el reloj, sabia que el tiempo estaba en nuestra contra, ya que la marea cada vez estaba mas baja. Finalmente conseguimos arrancar, mas tarde de lo previsto, pero arrancamos. En esta ocasión el Patrón me iba a llevar a un pesquero nuevo. No había nadie, todo para nosotros, una gozada. Mi hermana, adicta también a esta enfermedad, nos acompaño.

Comenzamos la jornada. Yo estaba ansioso, eléctrico, incluso nervioso por comenzar a pescar. Para colmo tarde 10 minutos en preparar mi equipo, ya que lo tenia armado con los bajos de surfcasting. Finalmente me aposte en mi lugar y comencé mis lances. Al tercero, Zas! noto la primera picada. Era una buena pieza. En ese momento me di cuenta de lo muchísimo que me gustaba este nuevo emplazamiento. Fue la primera vez desde que llevo pescando calamares, que los saco a nivel del mar, sin estar elevado en un muelle, viéndolos venir de frente a ti mirándote a los ojos... una experiencia increíble. A los pocos minutos, Zas! otra picada. Otro buen ejemplar que decidió abrazar con cariño mi potera. 

Debido al frenesí inicial, casi no disfrute de las capturas. Las saque del mar haciendo esquí acuático como si de un novato se tratase. Aproveche el tirón inicial y me mofe un rato de mis acompañantes "Bueno, aquí el experto esta claro quien es, panda de aficionados!!". No falto tiempo para que el Patrón pusiera los puntos sobre las ies.. "Uy que carallo!! vou ter que concentrarme e ponerme serio, je je je..". Dicho y hecho. Comenzó su recital. Entono su oda a los cefalópodos "Fiuuuuu!!!! vinde pa ca!! Puuuutttaasss!!!" y parecían que estos caían en sus redes como atraídos por un canto de sirena. Uno, dos, tres, cuatro.. el a su ritmo, como siempre. Yo deje de tener picadas, pero me lo pase en grande mientras tanto. También sentí bastante alivio al ver que mis luminosos 3.0 estaban dando la talla. El Patrón alucinaba con la intensidad lumínica de los susodichos.. "Mira, Mira como mola.. Fiuuuu!!! unha estrella fugaz!!!! isto e a ostia!!! molame moito!!"

Después de todo este ajetreo nuestro objetivo se centro en que mi hermana capturase algún bicho. La verdad es que estuvo mas tiempo tocándole la moral y haciéndole putadillas al Patrón, que fijándose en su propia pesca. Al final, se puso al tema, y logro sacar un buen ejemplar. Mas tarde, como comparten el cubo para guardar los calamares, se pasaron toda la noche discutiendo entre cachondeo, cual había sido el que ella había cogido. El Patrón decía que era el mas pequeño, y ella el mas grande.. la verdad es que había sido uno de talla media. Entre mientras, el Patrón seguía a lo suyo, sacando ejemplares para darles un bonito paseo en coche hasta su casa. A las diez dimos por concluida la salida. Solo fue una hora y media pero la verdad es que estuvo muy bien. Aquí dejo una foto de los premios. Los de la derecha son los míos y los otros del Patrón y mi hermana.


Volvimos a casa y cenamos. Programamos volver al muelle a las 0:30 mas o menos. Nos personamos de nuevo pero ya no tenia el feeling de antes. Habían apagado un par de focos y ya no era lo mismo. Para colmo, se había levantado un viento frío del norte muy desagradable. Hicimos unos lances, y el Patrón decidió que cambiásemos de zona a una un poco mas protegida del viento. Allá fuimos, pero básicamente con la misma suerte. Solo tuvimos una captura en hora y media. Aun así, un compañero de pesca que rondaba por allí, nos amenizo la velada con sus anécdotas y chascarrillos. Alucino con la potencia de mis luminosos e intento agenciarse uno... ya le dije.. "no hay problema, son 2000 € , jajaja". Por el momento no pienso hacer negocio con esto, los hago para mi y mis compañeros nada mas.

Regresamos a casa y pusimos punto y final a una jornada que llevábamos tiempo intentando disfrutar, que aunque bastante atropellada por las circunstancias, al final mereció la pena.

Un Saludo y Buena Pesca!

martes, 24 de febrero de 2015

Luciendo a los protagonistas

En esta ocasión quiero mostrar el arsenal del que dispongo para la caza y captura de nuestros amigos cefalópodos

Febrero está siendo muy duro. Si sumamos al frío intenso que hace, el viento indomable y la llegada de las lluvias, pues como que las condiciones no son las idóneas mas que para quedarse en casa calentito.

Aun así he descubierto que mi tozudez y cabezonería sobrepasan los límites de lo absurdo. A principios de mes, en plena ola de frío Siberiano, solo se le ocurre a un servidor tentar suerte en varias ocasiones. Con 0º en el muelle, con ráfagas de aire que se te clavaban en todo el cuerpo como cuchillos, y en época baja de capturas, lo mas coherente seria no salir. Pero no, no podía, tenía que dejarme llevar por el maléfico virus de la pesca, y allí estaba yo, caña en ristre, acompañado por algún loco más, chupando un frío inhumano para nada. Total... consecuencias?... las previsibles. Flemón de tamaño de una bola de tenis y otra semanita de antibióticos al canto.

Por desgracia siempre he tolerado muy mal el frío, al contrario que el calor de verano. Desde que comencé mi odisea pesquera he tenido que visitar tres veces al matasanos en un periodo de seis meses, más que los tres últimos años juntos. Todo esto me va a hacer mas fuerte, o acabar conmigo.. yo apuesto por la segunda opción. Dicen que de todo se aprende, pero se ve que soy de instrucción lenta. Lamento tener una salud tan quebradiza para estos menesteres, aun así, no me desanimo y espero con ansia que a finales de marzo con la llegada de la semana santa, las condiciones mejoren.

Mientras he aprovechado para tunear un poco el equipo, hacerme con alguna que otra potera nueva y algún cachivache más. La pesca es una adicción, y cada vez que cometes el error de pisar una tienda de deportes, siempre acabas saliendo con algo en las manos. Trato de medirme, de centrarme en marcas blancas ya que mi economía no da para mucho gracias al gobierno y su tasa de 25% de paro en la cual por desgracia me incluyo, aun así, no me quiero ni imaginar el gasto que haría, y el equipazo que tendría, si tuviese un trabajo y dinero en el bolsillo. Aquí dejo una fotillo con toda la plantilla al completo:


De calidad, tengo solamente tres Yo-zuri, una de ellas del modelo crystal, en la cual tenía depositadas muchas esperanzas, pero que a fecha de hoy y después de haberla puesto en remojo en varias ocasiones, aun no me ha dado ninguna alegría. Las otras dos han cumplido con creces, han sido mi buque insignia. El resto son un baturrillo de colores diferentes de marca blanca para tener alternativas en noches revoltosas. Luego los starlite de rigor, el cepillito y mis luminosos caseros, en los cuales pese a la frustración inicial, sigo trabajando. También tengo cuatro señuelos baratos para iniciarme en el spinning. En cuanto las temperaturas comiencen a ser decentes, intentaré comenzar con esta disciplina. No obstante, antes de ponerme en faena, tratare de hacerme con algún vinilo plomado, que según parece, funcionan muy bien en estas aguas.

Esto es todo por ahora, seguiré esperando con ansia que el tiempo nos dé un respiro y poder poner a remojo toda esta artillería.

Un Saludo y Buena Pesca!

lunes, 26 de enero de 2015

El aprendiz supera al maestro

Jornada de récord, pero no para mi, no, si no para mi piratilla, que poco a poco me va superando con creces

Hacía frío, bastante frío. Sinceramente no me apetecía bajar a pescar, pero en ocasiones un padre tiene la boca muy grande, hace promesas las cuales no está seguro poder cumplir, y al final no le queda más remedio que arrimar el hombro.

Este fue el caso. Por la mañana le había prometido al peque que iríamos a pescar, pero realmente no era consciente de las condiciones climatológicas. Según se iba acercando la hora prevista para el evento, las temperaturas se iban desplomando. Intente negociar un cambio de fecha pero no hubo manera. Es más cabezota que su padre, que ya es decir. 

Total, nos ponemos al lío. Preparamos merienda, bártulos y demases, y tiramos para abajo. Le acomodo el puesto, armo su caña y se la lanzó.


Hago lo propio con la mía. Al poco rato ya está reclamando sus galletas de chocolate... hoy realmente no lo veía por la labor de pescar, seguramente nos encontremos de esta guisa fruto de su cabezonería y no dar el brazo a torcer. Claro ejemplo es que prácticamente hacía caso omiso a la pesca, llegando a enrocar una potera en una cuerda que está pegada al muelle, era la primera vez que esto le sucedía. Pescando sin ganas, centrado más en el manjar de cacao que tenía entre sus manos, al menos pudimos disfrutar de esta bella puesta de sol:


Al poco rato, y con la desgana por bandera, me dice: "Papi! tengo algo enganchado".. observo su caña, y si, veo el puntal doblado. Habida cuenta de que yo ya había sacado un par de matojos de algas debido al estado revuelto del mar, di por sentado que seria otro tanto de lo mismo, y no le preste demasiada atención.. "Vale hijo, sigue recogiendo, y cuando llegues cerca del muelle me avisas...". Gire la cara y retome la conversación que estaba manteniendo con un pescador que tenía al lado, echándole una visual al peque de vez en cuando. El seguía a lo suyo, recogiendo. Poco después oigo un chapoteo en el agua, me giro y no salgo de mi asombro... traía algo.. y algo grande. 

Aun temiendo que debido al gran tamaño del espécimen se le pudiese escapar, no quise interferir, le deje traerlo hasta el muelle, era su captura. Según se iba aproximando, mi incredulidad crecía. Finalmente le ayude a ponerlo en tierra:


Pedazo de choco. Que orgulloso estaba. Después de esto, para él fue suficiente, se quiso marchar. Su jornada de hoy no duró más de 15 minutos, pero quedo como un crack.. llegar, pescar y marchar. Yo, como me encontraba ya enfrascado y tenía buena compañía, llame a mi mujer para ver si me hacía el favor de venir a buscarlo. Accedió, menos mal. En este sentido tengo mucha suerte, he de reconocerlo, me anima a pescar y me auxilia en ocasiones, que más se puede pedir?.

Al día siguiente el piratilla presumía de su pescata: "Lo cogí yo solito!!", posaba así de feliz con su gran captura, un chocazo de casi medio kilo:


Lo más gracioso, es que yo me quede 5 horas más, debido principalmente al buen rollo que reinaba en el muelle, y no conseguí quitar nada. La mofa al final de la jornada fue predominante: "pesca mas tu hijo que tu.. jajaja...". y es cierto, pocas veces de las que hemos ido juntos, se ha venido de vacío. Ya se sabe, las nuevas generaciones vienen pisando fuerte.


Un Saludo y Buena Pesca!

domingo, 25 de enero de 2015

Luminosos caseros.. la batalla continua

Siguiendo la linea brico-maniaca, me dispuse a mejorar el diseño de los luminosos

Después del desastre inicial, no me he venido abajo. Se que tiene que haber algún modo de lograrlo y seguiré intentándolo hasta que lo consiga. 

En esta ocasión, me replantee todo el diseño, cambie un par de materiales y configure de otra manera el interior para dotar de mas estabilidad al invento. La otra vez me había preocupado mas por el funcionamiento del aparato interno que de su estanqueidad. Craso error. Ahora había puesto mas énfasis para que no entrase agua dentro del cacharro.

Monte varios, con diferentes colores para observar el impacto que tenían debajo del mar. Los introduje en un vaso con agua para ver como iluminaban y su manera de flotar... pintaban muy bien, la verdad.


Acudí al muelle ansioso por probarlos. Que maravilla. Que bien se ven. Sabes en todo momento donde tienes la potera. Tienes un control absoluto de tus movimientos. Es una dimensión nueva en cuanto a la pesca del calamar se refiere. La gente allí presente estaba perpleja ante tal invención. Cuando puse a navegar el de color azul, alucinaban, después de estar acostumbrados años y años al verde fosforito de los comerciales, no daban crédito. Finalmente, tras una hora mas o menos de uso, mi gozo en un pozo... la peor de mis pesadillas... fallaban de nuevo.

Volví a casa frustrado, hundido, enfadado conmigo mismo... había puesto todos mis conocimientos en la palestra y confiaba que esta vez seria la definitiva. Los destripe y confirme lo que era obvio. Llegue a plantearme abandonar la empresa, que era imposible, que si los chinos no lo habían inventado, seria por algo. Continuaba entrando agua, y después de esmerarme al 100% de que eso no ocurriese, no encontraba explicación alguna. Me quede sin ideas y bloqueado, pero conociendo mi tozudez y lo que me gusta el bricolaje, volveré a intentarlo.

Un Saludo y Buena Pesca!

sábado, 17 de enero de 2015

Luminosos caseros

Me meto de lleno en arte de "hágaselo usted mismo" en esto del mundillo de la pesca

Navegando por internet encontré a un par de personas que hacían unos luminosos estupendos para poner en la punta de la caña cuando hacemos surfcasting. Como es de recibo, me puse manos a la obra, y confeccione los míos. Son estupendos, maravillosos, muy útiles y no veo el momento de probarlos en verano.

Pero siguiendo con mi ataque bricomaniaco me dije.. "Coño.. y si los adapto para la pesca del calamar???". así que me puse manos a la obra. Primero pensé cómo diseñarlos. El principal escollo es el agua. Tenían que ser extremadamente estancos, o un par de gotas del mar mandaría todo al garete. Así que le di vueltas y vueltas al asunto, y mas o menos, logre imaginarme un diseño factible.

Luego me volví loco recorriendo varias tiendas entre ferreterías, tiendas de electrónica, chinos, suministros industriales, etc. para encontrar los materiales necesarios. Mas o menos hice acopio de todo lo requerido, y logre confeccionarlos. Tenían muy buena pinta:


Con la emoción, decidí bajar al muelle a probarlos. Iba sin intención de pescar nada, la verdad, pero ilusionado por estrenar los juguetes nuevos. La primera toma de contacto fue impresionante, que bien se ven debajo del agua, incluso a bastante profundidad, es una maravilla. Para mi satisfacción la flotabilidad y navegabilidad no se ve afectada, algo que temía bastante, están bien compensados de peso. Al poco rato de estar usándolos, noto que la luz empieza a bajar drásticamente de intensidad... ummm.. mal asunto. Los chequeo y me doy cuenta de que algo no va bien, una pena. Al llegar a casa los destripe, y efectivamente, el agua del mar había hecho destrozos en su interior. 

Seguiré intentando mejorarlos e iré posteando los avances. La calidad lumínica que ofrecen debajo del agua es increíble, merece la pena el esfuerzo.

Un Saludo y Buena Pesca!

sábado, 10 de enero de 2015

Buen comienzo del 2015 y mucho frio

Antes de nada, felicitar el 2015 a quien pueda leer esto. Jornada de mucho frío, pero al menos, con recompensa.

Hacía tiempo que no me traía algo interesante para casa, y ya tenía ganas. Esta adicción, vicio, enfermedad o como quiera llamarse, de la pesca, está acabando conmigo. Mi salud no es muy boyante precisamente, si añadimos que últimamente he papado mucho frío por culpa de esta obsesión.. resulta muy mala mezcla. En Diciembre, como ya me sucediera en verano, contraje una infección de garganta de caballo. Resultado: una semana a antibióticos, tirado en cama, con fiebre alta y el miedo metido en el cuerpo.

Siempre me pasa igual. Hace frío, se que hace frío, mucho frío, pero al final acabo metalizándome y engañándome a mi mismo para auto-sugestionarme de que no hace tanto frío. Pero realmente si lo hace, y una vez que estoy en vereda me doy de bruces con la realidad, pero yo aguanto y aguanto. Todo esto lo tomo como experiencia y aprendizaje para años venideros. A finales de este, le diré a mi mujer que me esconda la caña de Diciembre a Marzo para no tener tentación.

Hoy después de casi un mes en dique seco, me apetecía mojar sedal. Me baje prontito para coger la mejor temperatura posible. Se nota que solo los enfermos osamos enfrentarnos a los elementos. De hecho solo quedamos cuatro gatos en el muelle, el resto, tienen dos dedos de frente y esperan a que las condiciones sean mejores para disfrutar de la pesca. Añoro muchísimo las noches de verano en las que pescaba en manga corta y a gustito.

Hoy también hacia frío. Baje abrigado hasta las trancas como de costumbre, pero nunca es suficiente. Finalmente pude hacerme con un bonito ejemplar de 400 gramos. Me dio buena lucha y satisfacción al llevarlo a tierra. Esperemos que las temperaturas comiencen a elevarse dentro de poco, esto es inhumano, al menos para mí.


Un Saludo y Buena Pesca!